El agotamiento emocional afecta hoy en día a muchas personas sin importar la situación que estén viviendo. Por ejemplo, puede padecerlo alguien que haya vivido un evento inesperado. En estos casos, puede predominar un desajuste entre lo que la persona entrega de sí misma y lo que recibe. En un ambiente donde exista alta exigencia también es posible que un individuo pueda padecer de carga emocional.
¿Qué es el agotamiento emocional?
El agotamiento emocional surge cuando una situación sobrepasa los niveles de la capacidad de tolerancia de una persona. Esto, debido a que el individuo ha agotado los recursos de afrontamiento a su alcance, sometido además, a niveles altos de estrés durante un largo tiempo. Un factor desencadenante también es la incertidumbre de no tener la certeza, de cuánto tiempo vivirá la situación que atraviesa.
Síntomas del agotamiento emocional
Cuando la carga emocional se intensifica comienza a exteriorizarse mediante múltiples síntomas que difícilmente pasan desapercibidos. A continuación, veremos algunos.
- El patrón de sueño cambia haciendo más difícil el poder dormir.
- Falta de energía o extremo cansancio físico, falta de motivación por los proyectos vitales, problemas de concentración o un estado de ánimo bajo.
- Sentir la pérdida de control de sí misma con reacciones impulsivas.
- El distanciamiento de familiares y amigos es otro síntoma que presenta una persona con carga emocional.
Síntomas físicos del agotamiento emocional
Algunos síntomas físicos comúnmente palpables que presentan quienes sufren de sobrecarga emocional son los siguientes.
- Falta o pérdida de ánimo.
- Respiración muy acelerada.
- Excesiva sudoración.
- Temblores en el cuerpo.
- Rechinar o apretar los dientes excesivamente,
- Contracción muscular.
- Presentar problemas gastrointestinales.
- Sentir nervios sin motivo alguno.
- Palpitaciones frecuentes en el corazón.
- Cansancio físico.
Consecuencias del agotamiento emocional
Quienes padecen carga emocional intensa quizá sientan que su vida ha cambiado, pueden percibir la presión del entorno, llorar constantemente y con facilidad, fumar con angustia, comer en exceso, reacciona de manera impulsiva, etc. En fin, cuando alguien no atiende este tipo de problema, esto incide de forma negativa no solo en su bienestar, sino también en sus proyectos y en su calidad vida.
Cómo combatir el agotamiento emocional
Dejar de anticipar las situaciones:
Esto es necesario ya que pensar en el futuro de manera excesiva acelera la carga emocional e incrementa los niveles de ansiedad.
Incluir el entretenimiento es tu vida: Esto también incluye alimentarse bien, buscar un momento de esparcimiento personal te hará tener calma.
Delegar responsabilidades: Es necesario comprender que una sola persona no puede resolver todas las situaciones por mucho que se desee. Por ello, es recomendable conocer los límites y evitar la sobrecarga.
Dormir el tiempo reglamentario: El descanso es indispensable para que el organismo recupere su energía y la mente pueda descansar. Una vez descansado, será más sencillo tomar decisiones acertadas.
No hay duda de que el agotamiento emocional trae consigo graves secuelas. En estos casos, es conveniente buscar ayuda de familiares o amigos, y también ayuda profesional. De esta manera, podremos disfrutar al máximo de lo que hacemos cada día de nuestra vida.