Tradicional, saludable, y muy deliciosa, la tinga de pollo, sin duda, es uno de los platos preferidos en los hogares de muchos mexicanos. En vista de ello, es útil conocer la receta para preparar tinga de pollo y las distintas formas de disfrutarla.
Los primeros registros documentales sobre la tinga, datan del año 1881, cuando apareció por primera vez en el recetario “la cocinera poblana”, puesto que se presume que dicho plato se originó en el Estado mexicano de Puebla. A pesar de los más de 200 años de su creación, la tinga sigue siendo uno de los platos más populares y consumidos, en la actualidad, en todo el país.
Esto se debe a que se caracteriza por ser un plato fácil y rápido de preparar, con ingredientes asequibles y que siempre hay en casa, siendo una receta saludable y con increíble sabor, que a todo el mundo le gusta. Asimismo, destaca su versatilidad para aceptar el reemplazo de ciertos elementos, para así crear versiones diferentes, pero sin sacrificar el sabor y su esencia natural.
Tradicionalmente, la tinga se prepara con carne deshebrada como ingrediente principal, la cual puede ser de res, cerdo, pollo o una mezcla entre ellas; sin embargo, una de las más elaboradas es la de pollo. Por tal motivo, hablaremos sobre la receta para preparar tinga de pollo y las formas de disfrutarla.
Tostadas de tinga de pollo
La receta de la tinga de pollo tradicional es bastante simple y rápida, para preparar y alimentar a la familia o invitados. Para ello, es necesario disponer de los siguientes ingredientes:
- 1 pechuga de pollo sin huesos.
- 630 gramos de tomates molidos con chile chipotle.
- 4 ajos.
- 1 cebolla.
- 250 ml de caldo de pollo.
- 45 ml de aceite vegetal.
- 1 rama pequeña de tomillo.
- Cantidad necesaria de sal.
Para preparar este delicioso guiso, se debe comenzar hirviendo el pollo acompañado de un ajo, media cebolla y sal. Una vez cocido, se reserva el caldo, y se deja enfriar la pechuga, para luego deshebrar. Aparte, se fríe la media cebolla restante y los ajos en una sartén con aceite, hasta que estén transparentes y dorados, respectivamente.
Ese es el momento para agregar los tomates molidos con chipotle, el pollo en hebras, el caldo y la ramita de tomillo. Se deja cocinar hasta el punto de ebullición, a fuego bajo, siendo esta la señal de que está listo; luego, se procede a servir sobre unas tostadas coronadas con un poco de crema.
Otras formas de comer tinga de pollo
Tal como se mencionó al principio, una de las razones por las que la tinga de pollo es tan popular en México, es porque es una receta que se puede adaptar sin problemas al gusto y la conveniencia de las personas.
En este sentido, a continuación se describen distintas formas de comer tinga de pollo para disfrutarla.
Tinga de pollo en salsa verde
Es una versión innovadora y muy sabrosa, que se puede comer con quesadillas o tostadas. Para ello, se toma como base la receta tradicional, pero en lugar de utilizar tomates rojos en el guiso, estos se sustituyen por tomates verdes. Asimismo, se agregan otros elementos, como el cilantro y el perejil, que además de reforzar los sabores, harán que el verde de la salsa sea muy vistoso.
Quesadilla frita de tinga de pollo con guacamole
Esta receta es perfecta para comer como almuerzo o cena, y es un acierto seguro que le va a gustar a todos, pues tiene los elementos preferidos de muchos comensales, como son las quesadillas fritas, el relleno de tinga de pollo, y por supuesto, el guacamole, con un toquecito picante que despierta el paladar.
Son platos que fascinan a los comensales. Siempre es un aliciente preparar una comida la cual se convierta en la preferida de todos para preparar en fiestas, ocasiones especiales o cualquier día de la semana.