Para tener una buena salud hacen falta muchos factores. La alimentación y el estilo de vida sin malos hábitos como el abuso del alcohol y el tabaco, así como el ejercicio regular son claves para evitar sufrir enfermedades en el futuro o para lidiar con problemas crónicos de salud.
Las personas con enfermedades como diabetes, artritis, condiciones cardiovasculares, quienes sufren de trastornos mentales o los que han perdido movilidad por causas de patologías diversas, degenerativas o accidentes no están exentas de tener calidad de vida.
Hoy en día, nutriólogos, fisioterapeutas y médicos en diversas especialidades, así como dispositivos creados para ellos ayudan a facilitar la vida a determinados pacientes. Estos son tres consejos necesarios:
1.- Acudir a un nutricionista
Nunca está de más acudir a un profesional de la medicina que ayude a crear un plan alimenticio que tome en cuenta el estilo de vida, sus particularidades y la necesidad de cada quien para tener los nutrientes adecuados. De allí que buscar un nutricionista Sevilla precios sea una buena idea.
Contrario a lo que se cree acudir a un nutricionista no es tan costoso y más si se considera lo que se gana en salud y bienestar. Pese a que un adulto promedio debe ingerir una dieta que tenga entre 1800 y 2500 calorías, no todo el mundo debe comer igual.
La edad, patologías crónicas o pasajeras, estilo de vida y el ejercicio o la actividad física que se haga durante el día inciden en la alimentación. Para ejemplificar lo dicho: los niños en edad escolar requerirán una dieta alta en proteínas y grasas sanas porque su cerebro está en pleno desarrollo.
Los adultos pueden necesitar menos proteínas de origen animal y menos grasas. Pero, si se trata de una mujer embarazada o que está dando pecho, la situación también cambia, al igual que si se habla de un atleta profesional o de alto rendimiento.
2.- Calidad de vida para las personas con movilidad reducida
La edad, patologías o accidentes pueden causar problemas considerables que impidan a personas determinadas caminar o realizar las actividades cotidianas con normalidad. De allí que la ortopedia y la tecnología se unen para crear dispositivos como una ducha para personas con movilidad reducida.
El baño es una de las situaciones en que las personas que dependen de otros se tornan embarazosas, pero con estas duchas se gana en autonomía, seguridad y privacidad, sobre todo si se acompañan con sillas u otros aparatos para garantizar la independencia y la intimidad.
Como todo el mundo debería poder ducharse tranquilamente, independientemente de sus capacidades físicas o mentales, el ingenio humano ha creado duchas que permiten automatizar y configurar los procesos de flujo de agua, lavado con jabón y secado para cada usuario y sus necesidades específicas.
Lo mejor es que no se necesitan varias duchas para la familia, ya que estas pueden adaptarse a cada miembro o tipo de paciente en centros sanitarios como una ducha universal.
3.- Una farmacia online de confianza
Contar con un negocio de medicinas, equipos de salud, suplementos y líneas de higiene personal como la Farmacia Salvador Leon es algo vital que toda persona debe tener en cuenta.
Las bondades de un establecimiento de esta naturaleza que permita compras por internet y entrega inmediata en la puerta de casa es un asunto invalorable en estos días. Confiere la comodidad, ahorro de tiempo y dinero que las transacciones online ofrecen a su público.
Son como la tradicional farmacia de barrio, pero abiertas las 24 horas para hacer las compras de la semana o el mes sin problema y en cualquier momento libre desde el móvil y el ordenador sin filas o turnos.
Por otra parte, los pagos, los datos y la confidencialidad están garantizados por sus plataformas amigables con sistemas de seguridad tan valiosos como la de los bancos.
Finalmente, no se puede negar que “pasear” por los pasillos virtuales de las farmacias online es una maravilla para los amantes de acceder a ofertas especiales.