Encontrar la felicidad en la vida cotidiana puede ser una tarea difícil. Siendo un estado emocional muy buscado, la felicidad puede aparecer brevemente, o verse influenciada por muchas otras cuestiones de nuestro trabajo y nuestra vida, lo que hace que sea difícil de encontrar.
¿Qué es la felicidad?
La felicidad es el estado mental de experimentar emociones positivas o agradables.
Según la experiencia, muchas personas definen la felicidad como el sentimiento de alegría intensa, lo que puede hacer más difícil sentir que somos felices en nuestra vida cotidiana. En realidad, la felicidad tiene muchos niveles, desde la sensación de satisfacción hasta el júbilo.
Muchos de nosotros nos embarcamos en una búsqueda para alcanzar los máximos niveles de felicidad de forma regular, y esto a menudo acaba en decepción. En lugar de la felicidad, intenta centrarte en la satisfacción.
¿Qué es la satisfacción?
El contentamiento es el estado mental de experimentar satisfacción. A menudo se siente cuando se practica la atención plena, o cuando se está a gusto con la mente, el cuerpo y el entorno.
Aunque todos experimentamos una serie de emociones cada día, puede ser útil practicar la búsqueda de la satisfacción de forma regular.
La próxima vez que te tomes un té o te sientes después de terminar un trabajo, dedícate uno o dos minutos a practicar el sentirse bien en tu cuerpo, en tu mente y con tus logros diarios.
Cómo encontrar la felicidad dentro de uno mismo
Ahora que conoces el concepto de satisfacción, aquí tienes seis pasos que se recomiendan a cualquiera que quiera sentirse más positivo en su vida diaria. Reencuadrar la forma de ver la felicidad, y de dónde la obtienes, pueden ser cambios sencillos que realmente marcan la diferencia.
Este es el proceso de seis pasos para sentirte más feliz en tu vida y en tu trabajo:
Dejar de perseguir la felicidad
Muchas personas relacionan la felicidad con la consecución de determinados objetivos o aspiraciones. Esta práctica convierte la felicidad en una recompensa, en lugar de una emoción que se merece sentir en el día a día.
Elimina tus barreras
Siguiendo con el punto 1, la segunda desventaja de fijar la felicidad en objetivos externos es que puedes caer en hábitos de pensamiento poco útiles.
Al depositar tu felicidad en algo externo, puedes olvidar que sentirse feliz es algo que viene de dentro, y que se puede encontrar mirando hacia dentro, en lugar de esperar a que una acción externa lo desencadene.
Practica la introspección
El tercer paso es practicar la mirada hacia dentro, con el fin de descubrir la felicidad desde tu interior. Es una actividad que requiere tiempo y esfuerzo, pero es un hábito que merece la pena.
Construye tu autoestima
Una vez que hayas empezado a comprobarte a ti mismo, también puedes empezar a abordar las áreas que puedan preocuparte. A menudo, los problemas internos pueden reducir la autoestima, por lo que puede merecer la pena dedicar algo de tiempo a cuidarse.
Estar presente
Al igual que la práctica de mirar hacia el interior, dedicar tiempo a estar presente a lo largo del día te permitirá disfrutar realmente de tu entorno y conectar con tus emociones a un nivel más profundo.
Apréciate a ti mismo
El último paso de mi proceso de seis pasos es dedicar tiempo a apreciarte a ti mismo. Aprecia tu trabajo, tu vida y tus logros. Puedes encontrar la felicidad simplemente reflexionando sobre acontecimientos pasados, algunos de ellos logros, y otros simplemente experiencias agradables.