Un equipo de científicos de la Universidad de Adelaide en Australia trabajan en la posibilidad de desarrollar una batería cuántica. Afirman que este concepto hasta ahora totalmente teórico puede ser el gran salto de la humanidad a fin de conseguir la sostenibilidad energética que tanto urge a la civilización.
El equipo sostiene que este tipo de batería utiliza las propiedades de los átomos entrelazados cuánticamente a fin de cargarse mucho más rápido usando la luz ambiental. Por lo que en consecuencia no van a necesitar una fuente externa para cargarse.
Este trabajo sigue los estudios realizados por un equipo científico canadiense en 2019 quien para ese entonces propuso la idea de abandonar las baterías de ion de litio y reemplazarlo por otras usando el concepto de la mecánica cuántica.
¿En qué consiste la batería cuántica fotocargarle?
El Doctor James Quanch autor principal del estudio explica que cuando los átomos están entrelazados cuánticamente estos producen el efecto denominado super absorción. Usando la deposición física de vapor por haz de electrones, los investigadores diseñaron microcavidades de moléculas orgánicas que absorben luz a través de una tinta llamada Lumogen-F Orange.
La deposición física de vapor por electrones es una técnica que consiste en un rayo de electrones que se usa para vaporizar los átomos de un ánodo y que estos a su vez se depositen en capas dentro de una cámara de vacío.
Éstas micro cavidades se colocan entre dos espejos de gran calidad. Construidos a partir de materiales dieléctricos como el dióxido de silicio y el pentóxido de niobio, crean un reflejo Bragg distribuido. De esta forma la luz permanecerá dentro de la cavidad por mucho más tiempo.
Estas capas de apenas unos nanómetros de grosor se cargan de energía a una velocidad extremadamente alta y eficiente gracias a que el entrelazamiento cuántico produce un efecto de super absorción. Y a medida que se aumenta el tamaño de la micro cavidad mayor es la velocidad de carga.
Una tecnología que tardará en llegar
Aunque es cierto que aún falta para llegar a tener una batería de este tipo en nuestros móviles, el equipo de investigadores se muestra optimista. El siguiente paso en su ruta a fin de convertir la tecnología en una realidad será desarrollar una proto batería cuántica que constará de tres capas: la capa de carga, la de almacenamiento y la última de descarga.
El efecto cuántico estará en la capa de carga. Prevén que tendrán su primer prototipo dentro de tres a cinco años y servirá para alimentar pequeños dispositivos. La llegada de esta batería al mercado será una revolución energética.